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Nací en Algeciras, en 1939, en el nº 1 de la Calle Ancha, ciudad en la que residí hasta que, a los pocos meses, mi padre, de profesión militar, fue destinado a Toledo, a donde nos trasladamos. En Madrid, vivía mi tío Aurelio, pianista y director de orquesta, por lo que las idas y venidas a la capital se hicieron frecuentes para acudir a funciones de teatro, zarzuela y visitas al Museo del Prado, acciones, sobre todo esta última, que aumentarían mi interés por la pintura y las bellas artes en general.
Transcurridos siete años, volvimos al Campo de Gibraltar, a la vecina ciudad de San Roque, lugar de nacimiento de mis abuelos paternos, donde viviría veinticuatro años. Allí encontré apoyo a mis aficiones artísticas: Música, en el coro parroquial; Teatro, en el Grupo Artístico que creara y dirigía Paco Jiménez; Radio, en la temporal emisora “Radio Campaña de Navidad”; Pintura, con la observancia del trabajo de artistas locales y comarcales, pero, sobre todo, con las exposiciones-concurso que, anualmente, convocaba el Ayuntamiento, y en las que empecé a obtener mis primeros modestos éxitos.
Cursé mis estudios de Bachillerato en el Instituto de Enseñanza Media, de Algeciras, en el que, años más tarde, desarrollaría la mayor parte de mi carrera docente, ya con otras denominaciones: “Femenino”, “I.B. Mixto II”, y actualmente, “KURSAAL”.
Queriendo seguir los pasos de mi padre, ingresé como soldado voluntario para conocer el Ejército desde su escalafón más bajo y con vistas a ingresar en la Academia General Militar, de Zaragoza. Una vez finalizados el 6º Curso y su Reválida, en el verano de 1957, me integré de lleno en la vida castrense, con el propósito de, en el otoño, poder iniciar la preparación para la Academia General. Pero los acontecimientos en el África Occidental Española, que desembocaron en la guerra de IFNI-SAHARA, me lo impidieron, debiendo marchar con el Batallón Expedicionario de mi Regimiento ( Infantería “Pavía Nº19” ) para permanecer en Ifni durante siete meses, al comienzo de los cuales murió mi padre.
Al regreso, y después de algún tiempo de desorientación, comencé los estudios que me llevaron a aprobar el Primer Grupo en la Academia de Zaragoza. Me faltaba aprobar un Segundo y definitivo Grupo. Fui convocado al Curso de Sargentos, que realicé en Hoyo de Manzanares, y destinado a Lanzarote. Al poco tiempo pude volver a San Roque, donde, meses antes, había conocido a Mercedes, mi novia. Ya, de nuevo en mi Regimiento, comencé a tener dudas sobre mi futuro en el Ejército: después de meditar mucho, decidí no seguir con la preparación para el ingreso en la Academia General y dejar la vida militar. Puesto que me gustaba la Enseñanza, el Dibujo y la Pintura, me haría Profesor de Dibujo.
Estudié la Carrera de Magisterio, aprobé las Oposiciones y pedí mi baja del Ejército (después de cuatro años como Sargento). Fueron unos días y unos momentos duros, pero la decisión estaba tomada.
Como Maestro Nacional fui destinado “provisionalmente”, al Colegio de Algeciras “Virgen del Mar”. Mi destino “definitivo” fue como Director de la Agrupación Escolar “José Antonio”, en Taraguillas, San Roque. Me casé con Mercedes, nació nuestro primer hijo, Antonio, y comencé la Carrera de Bellas Artes. Nos trasladamos a Algeciras, al colegio “San José de Calasanz”. Aquí nació nuestro hijo Juan Vicente. Cuando finalicé mis estudios de Bellas Artes, preparé las oposiciones a Cátedra de Instituto de Bachillerato, a las que me presenté, durante un caluroso mes de Julio, en Madrid, y pude “sacar”, con el número uno de mi turno. Este resultado me daba opciones a elegir ciudades como Madrid o Barcelona, pero preferí, de acuerdo con Mercedes, ocupar la Cátedra de Dibujo vacante en mi antiguo Instituto. Y aquí nos quedamos.
En 1990, la Universidad de Cádiz, me ofreció una plaza de Profesor Asociado de Dibujo Técnico y Geometría Descriptiva, en la Escuela Politécnica Superior, de Algeciras, que acepté y ocupé durante diez años, compatibilizando esta actividad con mis clases de Bachillerato.
Actualmente me encuentro retirado de mi labor docente, y dedicado, entre otras ocupaciones, a seguir aprendiendo y practicando la apasionante actividad que ha llenado, con gran satisfacción, una gran parte de mi vida: La Pintura.
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